“La economía al alcance de los economistas” Antonio Lucena.
Eds. Cinca, Madrid 2006. 186 páginas.
En su capítulo de conclusiones, Antonio Lucena recoge el siguiente chiste de economistas. Un cirujano, un ingeniero un economista están debatiendo cuál es la profesión más antigua. El primero afirma que sin duda la suya: Dios necesitó un cirujano para extraerle a Adán su costilla. El segundo defiende su primacía: antes de tal operación el Creador, en funciones de ingeniero, se encargó de la separación de las aguas y de las tierras. El economista pregunta entonces: ¿y qué existía antes de los trabajos de los Seis Días? Sus dos interlocutores responden al unísono: el caos. Ante lo cual replica el economista: ¿y quién creéis que era el responsable de ese caos?
Aunque a Lucena -por fortuna- no le falta humor, su breve e intenso libro aborda algunas de las cuestiones más serias concebibles: cómo organizan las insostenibles sociedades modernas la producción de lo necesario y de lo innecesario, qué podemos entender por sostenibilidad y cómo se ha degradado este término, de qué manera pensar la justicia social y el pleno empleo en esta etapa nuestra de "mundo lleno"...
"Este libro se ha escrito para ayudar a poner coto a unos profesionales [de la economía] que, siendo absolutamente necesarios, parece que trabajan en beneficio de los marcianos que, en una segunda etapa, tras ésta de la destrucción preparatoria, invadirán la Tierra para hacerse con las cenizas de lo que quede de ella" (p. 179). Pero sabemos que no hay marcianos capaces de asumir esa responsabilidad, y sabemos que no hay Tierra de recambio a la que mudarnos si devastamos la biosfera. Antonio Lucena pone en manos del lector, de la lectora, una clara y didáctica introducción al ámbito de problemas que explora la economía ecológica, visitando también algunas de sus respuestas. En su muy recomendable libro hay herramientas útiles para frenar la devastación en curso.
Jorge Riechmann