El número de diferentes usos de los disolventes orgánicos es infinito, y por tanto, las alternativas varían incluso para un mismo disolvente según su aplicación.
La aplicación de disolventes como decapantes de pintura, por ejemplo, uso muy extendido en muchos sectores, ya se viene sustituyendo en algunos países, por sistemas de voladura con partículas de plástico, de almidón de trigo, de bicarbonato sódico, de agua a presión media o con nitrógeno líquido a bajas temperaturas. Estas opciones presentan diferentes ventajas, como son la no generación de emisiones orgánicas volátiles, la posibilidad de recuperar y reutilizar los residuos sólidos y la eliminación de aguas residuales para procesos en seco, o de polvo para procesos en base acuosa. (Guide to Cleaner Technologies: Organic Coating Removal - EPA/625/R-93/015, Office of Research and Development, Washington DC 20460).
Otro uso muy extendido de los disolventes es la limpieza y desengrase de piezas. Algunas alternativas que proporcionan un resultado equiparable y eliminan el uso de disolventes o reducen las emisiones de los mismos en el caso de no poder sustituir a corto plazo, son los siguientes: sustitución con soluciones de base acuosa, limpieza automática acuosa, limpieza ultrasónica de piezas, control de la velocidad de inmersión y extracción de piezas para minimizar las emisiones, estudio del manejo y diseño de las perchas y soportes, optimización de la temperatura de trabajo, utilización de tanques cerrados, etc. (Guide to Cleaner Technologies: Cleaning and Degreasing Process Changes - EPA/625/R-93/017, Office of Research and Development, Washington DC 20460).
La lista de posibilidades de sustitución de los disolventes orgánicos es amplia, por lo que resultaría pretencioso querer tratar todas las alternativas en este boletín. No obstante, se han elegido dos casos específicos de sustitución de disolventes que ya se están desarrollando en diferentes países, cuyos resultados ya demuestran ser equiparables, las ventajas para la salud del trabajador/a y el medio ambiente son claras, y la viabilidad técnica y económica de transición resultan competitivos: el uso de percloroetileno para la limpieza en seco y de disolventes para la limpieza de imprentas off-set (Proyecto SUBSPRINT).